Jorge Andrés Ormeño: El patrón del puerto que conquistó San Carlos
Jorge Ormeño Guerra debutó en Santiago Wanderers y es declarado fanático del club porteño. Sin embargo, con la casaca de Universidad Católica rindió siempre. Sus años en San Carlos lo hicieron transformarse también en un cruzado más. Llegó en 2004 y se mantuvo hasta 2012, siempre como titular. Sumó títulos y llegó a colocarse la jineta de capitán. Aquí su historia.
Un chico de Viña
Ormeño nació en Viña del Mar. Su infancia la vivió la Ciudad Jardín y fue ahí donde dio sus primeros pasos en el fútbol de barrio. Cuando decidió tomar el camino del deporte, Santiago Wanderers fue el club que escogió. Fue a Valparaíso, se probó y quedó. Hizo todas las divisiones inferiores en el Decano. En 1997 debutó en el primer equipo y con las temporadas fue consolidándose como un referente en Playa Ancha.
Como en muchos casos, el comienzo fue difícil. Decidir entre los estudios o el fútbol es una disyuntiva por la que muchos jugadores deben pasar. Para Jorge, en ese sentido, siempre es necesaria la figura de un mentor. “Todos necesitan una mano en algún momento de la vida. Yo tenía mucha incertidumbre sobre mi futuro. Por suerte para mi llegó el profe (Jorge) Garcés que me tenía considerado en un proyecto a largo plazo”, detalló a Frecuencia Cruzada hace algunos años.
El título de 2001 fue el salto definitivo para el Patrón. Con el Peineta en la banca, los porteños lograron su tercera estrella de Primera División y Ormeño era uno de los puntales de esa escuadra. Sus actuaciones llamaron la atención en la precordillera.
De Valparaíso a San Carlos
La UC adquirió el pase de Jorge Ormeño en 2004. Le tocó un primer semestre irregular, pero después todo fue alegría. En ocho años jugó más de 300 partidos. Fue parte de los títulos de 2005 y 2010. En 2006 se metió en los corazones con una gran actuación en la Copa Libertadores, ante Deportivo Cali.
Claro que para el exvolante, sus buenos recuerdos van más allá de los títulos. «Recuerdo que al Fantasma Figueroa le gustaba jugar con línea de tres y exponía a la defensa, entonces yo como volante defensivo debía hacer la cobertura para que no nos pillaran mal parados. Durante el 2009 la mayoría de los partidos ganamos. Pero recuerdo que en la semifinal ante Unión Española nos vimos mal, finalmente perdimos por penales. Si hubiésemos sido un poco menos osados, esa llave la ganábamos”, aseveró, recordando el Apertura.
Pero las alegrías llegaron en el Bicentenario. «Todo fue por un proceso bastante bueno. Ya el 2009 jugábamos muy bien. El 2010 se retoma con Pizzi, pero con un plantel armado por el Fantasma. Se termina con el título debido a una base de trabajo definida”, recordó.
Un cruzado adoptado
Jorge Ormeño jamás ha ocultado su cariño por la UC. A mediados de 2016 hizo un partido de despedida en el estadio Elías Figueroa Brander de Valparaíso, donde un combinado de históricos de Santiago Wanderers enfrentó a leyendas de Universidad Católica. Un resumen de lo que fue la carrera del Patrón, dividida en dos equipos. Luego de su retiro se ha dedicado a la formación. Dirigió al equipo femenino de la Corporación Wanderers y ahora hace lo propio en Unión Glorias Navales, justo el rival que la Franja eliminó en Copa Chile.